Por Fausto Triana
Horas antes del duelo semifinal entre España y Francia, la atención parece desviarse hacia el protagonismo de los dos atacantes, Yamal con la Roja y Dembelé con Les Bleus.
El entrenador principal de los españoles, Luis de la Fuente, sacó pecho este jueves al afirmar que su equipo es favorito para ganar la Nations League, la Eurocopa y la Copa Mundial, porque “por primera vez tiene un Messi en sus filas, Lamine Yamal”.
Cumplirá 18 años y sus prestaciones de notable virtuosismo lo confirman probablemente como la estrella naciente del balompié universal, mientras que Dembelé, más veterano, acaba de firmar una temporada de ensueño con el París Saint Germain en la Liga 1 y en la Champions League.
En todo caso, esta noche habrá una buena oportunidad para verse las caras en Stuttgart, entre el conjunto dirigido por De la Fuente, y el galo comandado por Didier Deschamps.
Con una alineación variable, cuenta, sin embargo, con fijos como el portero Simon, el central Le Normand, los volantes Pedri y Fabián, Lamine y Nico Williams.
A su favor, un desgaste físico relativamente menor al de varios franceses que estuvieron involucrados el sábado pasado en la final de la Champions y, por tanto, en celebraciones o en el manto del fracaso.
España es un equipo que maneja bien el balón y ataca de forma incisiva. Tal vez sus falencias están en la defensa por el centro, aunque tampoco es demasiado vulnerable.
Junto a Dembelé y Dessiré Doué, este último el Mejor Jugador Joven de la Champions League, Francia tiene una escuadra también de mucha calidad, con figuras como el joven Bradley Barcolá, junto con los más descansados Kylian Mbappé y Antoine Griezmann.
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